La Wilier Triestina Rave SLR es una de las bicicletas que más atención ha despertado esta temporada 2022. Esta original propuesta de gama alta de la marca italiana se enmarca tanto dentro de su colección de carretera como de gravel, ya que es apta para ambas modalidades.
Y es que además de como kit de cuadro, Wilier ofrece este modelo con montajes específicos orientados tanto a la carretera (road o allroad) como al gravel. Por lo tanto, el usuario puede elegir qué uso principal y orientación dará a la Rave SLR según los componentes que elija.
Asimismo, con apenas unos cambios -especialmente en lo que a ruedas y neumáticos se refiere- el afortunado poseedor de esta bici puede pasar de practicar una disciplina u otra siempre con las más altas prestaciones. En cualquiera de los casos, la deportividad será una de las constantes de esta montura.
De hecho, ya os hemos hablado en ocasiones anteriores de las victorias en competición de la Wilier Rave SLR. Su elevado rendimiento la ha convertido en una bicicleta ganadora en diferentes carreras gravel de la mano de ciclistas como Ivar Silk o el corredor del Astana Alexey Lutsenko.
Más gravel que carretera
Aunque es tan apta para el asfalto como para las pistas de tierra, es en este último terreno donde a nuestro entender la Rave SLR brilla más. Wilier Triestina cuenta con diferentes modelos de carretera de nivel profesional, como la Filante SLR o la 0 SLR, por lo que en esta modalidad la Rave SLR tiene mayor competencia (y más especializada) incluso dentro de casa.
En cambio, dentro de la gama gravel de la firma italiana, se posiciona como una opción de más alta gama y de orientación más deportiva que la Jena. Este otro modelo con cuadro de fibra de carbono es más económico y polivalente, por lo que está más indicado para un uso recreacional, el bikepacking o el ciclismo de aventura.
Nosotros hemos probado la Rave SLR durante los últimos meses en diferentes tipos de terrenos, pero donde lo hemos hecho más y hemos disfrutado al máximo de ella ha sido en caminos y senderos no asfaltados. Incluso en carretera y con ruedas y neumáticos gravel la bici se defiende bien en salidas y rutas relajadas, pero es al salir del asfalto donde saca a relucir su mayor potencial.
Deportiva y ligera
La geometría de su cuadro podría considerarse relajada o tipo endurance si la comparamos con una bicicleta de carretera deportiva. En cambio, si lo hacemos con un modelo gravel, sus medidas son mucho más agresivas que la media, lo que refleja su carácter competitivo.
Esto nos invita a pedalear rápido cuando transitamos por pistas de tierra en buen estado. Mantener altas velocidades es fácil con la Rave SLR, que nos lleva a sumar kilómetros casi sin darnos cuenta. Las sensaciones son muy parecidas a las de conducir una bicicleta de carretera, aunque fuera del asfalto. Básicamente es eso, ¿no?
Otra de las claves de sus altas prestaciones es su ligereza. El cuadro de fibra de carbono pesa solamente 950 gramos, mientras que la horquilla unos 415 g. Gracias a ello y a los componentes de gama alta que Wilier ha escogido para ella encontramos montajes de poco más de 7 kilos para la carretera y de unos 8 para el gravel, cifras increíbles para esta modalidad.
El bajo peso de la Rave SLR nos facilita lógicamente escalar las pendientes más duras. Ponernos de pie sobre ella y aplicar potencia en los pedales nos impulsa adelante como en pocas bicicletas gravel hemos experimentado.
Su ligereza y rigidez la hace también reactiva y manejable, algo igualmente útil en cambios de ritmos o cuando rodamos por zonas más técnicas en las que debemos frenar y coger impulso de nuevo en bastantes ocasiones. Por supuesto, resistencia y un confort razonable son otros de los factores que definen a esta bici.
Componentes de gama alta
Cómo no, los componentes de sus diferentes montajes contribuyen a reforzar las excelentes prestaciones de la Rave SLR. Wilier Triestina ha seleccionado los más adecuados para apoyar el carácter deportivo de este modelo.
En la unidad que nosotros hemos estado utilizando, destacaba el grupo Campagnolo Ekar 1×13 con frenos de disco. De las muchas virtudes de esta transmisión monoplato ya os hemos hablado al detalle tanto en un extenso artículo de presentación como en un test específico del producto, por lo que os recomendamos echarles un vistazo para conocer más a fondo sus avanzadas características.
Otro de los elementos que determinan gran parte de las sensaciones de la Rave SLR es su cuadro de mandos. Wilier ha elegido su manillar de carbono con potencia integrada J-Bar en los montajes gravel, mientras que el Zero Bar se encuentra en los de carretera.
En ambos casos su rigidez es más que notable, sin olvidar que albergan en su interior los cables para una estética más limpia y atractiva. En línea con la propia Rave SLR, las medidas del J-Bar llaman a una posición agresiva sobre la bicicleta en comparación con otros manillares gravel más anchos y relajados.
Ruedas: Miche Carbo Graff y Campagnolo Levante
Las ruedas y los neumáticos son clave a la hora de hablar del rendimiento y las sensaciones de cualquier bici, más aún en el gravel si cabe. En este caso, nosotros hemos probado la Wilier Rave SLR con dos excelentes modelos: las Miche Carbo Graff y las Campagnolo Levante.
Las primeras de ellas son las ruedas gravel tope de gama de Miche, marca asociada a Wilier Triestina. Su llanta de fibra de carbono y sus componentes de la más alta calidad consiguen un destacadísimo peso de solo 1.445 gramos el par, lo que las sitúa entre los modelos más ligeros del mercado.
Las Carbo Graff son el complemento perfecto de la Rave SLR si lo que buscas es volar sobre pistas de tierra rápida, aunque también se desenvuelven bien en otros terrenos. De hecho, nosotros montamos en ellas unos neumáticos tubeless Hutchinson Tundra de 700×40 (la Rave SLR admite cubiertas de hasta 42 mm de anchura) para añadirles cierta capacidad off-road, lo que fue de ayuda en terrenos más rotos, zonas bacheadas y superficies con piedras y raíces.
En cuento a las Campagnolo Levante, probamos este nuevo modelo recientemente con la Rave SLR. Nos gustó mucho su polivalencia y calidad de construcción, así como su peso liviano (1.485 g).
Quizás no tan deportivas como las Miche Carbo Graff, estas ruedas gravel proporcionan igualmente un gran rendimiento y estabilidad por su anchura ligeramente superior. Con unos neumáticos Vittoria Terreno Dry de 38 mm más rodadores y de menor taco que los Tundra, las Levante hicieron igualmente un gran tandem con la Rave SLR a la hora de ir rápido.
Dos bicicletas en una
Después de probarla a fondo en numerosas salidas, en diferentes terrenos y con distintos componentes, podemos confirmar que la Wilier Triestina Rave SLR es una de las bicicletas gravel deportivas más destacadas del mercado. Su orientación hacia la competición no la hace tan polivalente ni confortable como otras propuestas de esta modalidad, pero para ello la marca italiana ya cuenta con la Jena, como hemos explicado.
Estamos antes un modelo exclusivo y elitista que brilla por su calidad, altas prestaciones y cuidada estética. Lógicamente esto tiene un precio y no es bajo precisamente: la Rave SLR se puede adquirir como kit de cuadro (con horquilla, manillar integrado, dirección y tija) por 5.000 euros y en montajes entre los 9.000 y 11.000 € en carretera y 5.900 y 8.400 en gravel.
A cambio tenemos un modelo que, además de todas las virtudes y características que os hemos explicado, sirve tanto para el gravel como la carretera cambiando simplemente las ruedas. En ambas disciplinas tiene una orientación muy marcada, pero al fin y al cabo tenemos dos bicicletas en una. ¡Y dos muy buenas!
+ Positivo: Deportividad · Ligereza · Componentes
– Negativo: Precio
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FOTOS: Gerard Campderrós
