El Valegro es un modelo de sobras conocido por los ciclistas. Este casco de bicicleta fue lanzado por Kask en 2017 y desde entonces no ha sufrido apenas variaciones.
Aunque en un principio no contó con la popularidad de otros productos de la marca italiana, poco a poco se ha ido abriendo un hueco entre las preferencias de ciclistas amateurs y profesionales. Y es que el éxito de cascos como el Protone ha eclipsado al Valegro pese a que éste cuenta con numerosas virtudes para triunfar.
Nosotros mismos probamos el Kask Valegro hace varias temporadas y, aunque nos gustó, no lo puntuamos tan alto como otros modelos de la firma trasalpina que también hemos probado. Ahora, con la visión más reposada que da el tiempo, hemos querido volver a someterlo a test y ver cómo ha soportado el paso de los años.
Lo primero que debemos decir es que ha envejecido muy bien. Si Kask apenas ha actualizado algunos elementos o hecho pequeños retoques más allá de cambios de colores es porque es un casco que sigue plenamente vigente. En este sentido, su diseño es atemporal, con un estilo elegante y discreto con un toque deportivo que encaja perfectamente con las bicicletas y la ropa actual.
Máxima ligereza y ventilación
Entre los cascos de carretera Kask de gama alta, el Valegro siempre ha estado posicionado como el más ligero y ventilado de todos ellos. Con 200 gramos de peso en talla M, es más liviano que los modelos premium Elemento (260 g) y Nirvana (270 g), el polivalente Protone Icon (230 g), el aerodinámico Utopia Y (260 g), el peculiar Wasabi (260 g) o el más económico Mojito³ (230 g).
No es una cifra de récord en el mercado actual, pero sin duda el Valegro es un casco muy ligero sin ser esa su única cualidad, ni mucho menos. Este bajo peso lo hace también muy cómodo en salidas largas, en las que llegamos a olvidar que lo llevamos puesto.
La otra gran baza del Valegro es su excelente ventilación, lo que lo hace especialmente indicado para jornadas muy calurosas. Con 37 orificios de ventilación y una canalización del aire optimizada, la cabeza de refrigera perfectamente en momentos de máximo esfuerzo, como subidas de puertos de montaña, y el sudor se seca rápidamente.
Cabe destacar que el almohadillado es transpirable y de secado rápido, además de presumir de otras cualidades, como su capacidad antiestática o bacteriostática. En la zona de la barbilla, la ya clásica correa de cuero ecológico de Kask sigue presente. Nunca hemos sido demasiado fans de este elemento, pero la verdad es ya nos hemos acostumbrado a él e incluso esta vez nos ha parecido más moldeable, fina y confortable que en ocasiones anteriores.
El ajuste se asegura con el efectivo sistema Octo Fit con ruedecilla de regulación trasera. Por supuesto, la seguridad está más que garantizada, ya que además de cumplir todas la normativas y estándares internacionales, el Valegro también ha pasado el Kask Rotational Impact WG11 Test propio de la marca de Chiuduno (Bérgamo). Como con el resto de cascos Kask, sigue sin haber versión MIPS, pero ya no la echamos tanto en falta.
Precio competitivo
Otra gran baza del Valegro es su precio competitivo. Con una tarifa de 209 euros, apenas se ha encarecido con el paso de los años pese al aumento del coste de casi todos los productos ciclistas.
Asimismo, se trata del casco de carretera (aunque también puede usarse perfectamente para gravel, mountain bike o incluso en ciudad) más barato de Kask dentro de su oferta de gama alta. Así, y sin entrar en interminables comparaciones con otras marcas, el Valegro cuesta 66 euros menos que el Protone Icon y el Utopia Y (ambos con un precio de 275 €), 91 € menos que el Wasabi (300 €), 151 € menos que el Nirvana (360 €) y hasta 166 € menos que el Elemento (375 €), ni más ni menos.
Evidentemente, no es un casco barato ni al alcance de todos los presupuesto, pero su coste nos parece más que razonable viendo los precios de hoy en día. Por ello y por el resto de virtudes que os hemos ido explicando (diseño, ligereza, ventilación…), el Kask Valegro es una opción muy recomendable para los usuarios que busquen un casco de altas prestaciones, especialmente si viven en zonas de climas calurosos.
Las posibilidades de ajuste de las correas o el hecho de no introducir novedades estéticas después de tantos años pueden ser los puntos más flojos de este modelo. De todas formas, con el paso del tiempo hemos confirmado que estamos ante un producto excelente y nuestra puntuación en este test es superior al primero que hicimos.
+ Positivo: Ventilación · Peso · Precio
– Negativo: Regulación de correas
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FOTOS: Diego Sperani / Kask
















