Sebastián Mora se ha proclamado campeón de Europa de Scratch por tercera ocasión en su carrera, dos como élite y una como sub23. En el velódromo Omnisport de Apeldoorn (Holanda), el ciclista castellonense ha evitado una resolución al sprint gracias a un poderoso ataque a siete vueltas del final que le ha dado una ventaja insalvable para sus perseguidores, entre los que el griego Christos Volikakis y el holandés Wim Stroetinga se han hecho con la medalla de plata y el bronce, respectivamente.
La prueba de Scratch, una de las pruebas más destacadas del Campeonato de Europa de Ciclismo en Pista, contaba con una gran participación, que incluía a Consonni, Coquard o Walls, además de los ya mencionados Mora, Volikakis o Stroeting. La carrera ha asistido, como es habitual, a multitud de intentos y ataques, pero ninguno de ellos ha fructificado hasta la llegada de los doce giros finales.
En ese momento, Sebastián Mora ha propuesto un primer cambio de ritmo que el resto de competidores ha logrado sofocar a siete vueltas del final. En el mismo instante en el que cazaban al ciclista de la Selección Española, se ha producido un pequeño parón que Mora ha aprovechado para lanzar otro ataque, que en esta ocasión sería el ganador. El castellonense ha mostrado su poderío como rodador para mantener la renta respecto a sus perseguidores, que han tenido que conformarse con esprintar por las medallas de plata y bronce.
“Viendo los participantes, sabía que iba a ser una carrera muy táctica. Sabía que había gente mucho más rápida, como Coquard o Consonni, y me la he jugado a falta de doce vueltas para el final. Me han cogido, pero me he vuelto a lanzar, he cogido hueco y ya he ido a tope hasta la línea de meta”, comentaba Mora sobre el desarrollo de la carrera. “Este oro es el premio al trabajo que he hecho todo el año y ahora toca seguir trabajando para hacer un buen final de temporada con la pista y encaminar definitivamente la clasificación para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020”, afirmaba.