A nadie hace falta que se le explique qué es el Tour de Francia. Mucho menos a los que siguen con pasión las andanzas de sus grandes ídolos del pedal desde hace décadas.
Lo que alguno quizás aún no sabe es que la gran vuelta francesa de 2023 va a tener un marcado acento vasco. Y es que el pistoletazo de salida en la lucha por el maillot amarillo se dará este año en pleno centro de Bilbao.
La gran salida del Tour
Hacía bastante que las autoridades vascas venían luchando por conseguir la salida de la vuelta francesa. Lo cierto es que ésta no es la primera vez que se logra, ya que la serpiente multicolor partió en 1992 de las callas de San Sebastián.
Sin embargo, lo que hay preparado en esta nueva ocasión es toda una fiesta en la que el País Vasco se va a mostrar como un destino de primera. Una de las cosas buenas de una carrera como ésta es que permite que personas de todo el mundo puedan ver los paisajes de un territorio sin tener que moverse de casa.
Lo que es aún mejor es que no sólo será la salida la que se lleva a cabo en tierras vascas. El Tour se mantendrá dentro de Euskadi durante tres etapas que pasarán por muchos de los lugares míticos para los ciclistas vascos.
El País Vasco ama el ciclismo
Aunque las apuestas deportivas en carreras de ciclismo ya se han lanzado desde hace meses para las grandes vueltas de verano, lo cierto es que quién sea el que gane la prueba es casi lo que menos importa al público vasco.
Si hay un territorio en España en el que el ciclismo significa mucho, es esta región del norte. Las dos ruedas de la bicicleta están completamente enraizadas en la cultura de Euskadi. En buena parte, esto se debe a una orografía abrupta que pone al ciclista a prueba continuamente.
No se puede olvidar que la primera vez que el Tour de Francia pisó suelo español, algo que sucedió en 1949, lo hizo precisamente en San Sebastián. Tampoco se puede dejar de lado el que el País Vasco sea la región de España con un mayor número de clubes de ciclismo, con más campeones de etapa en las grandes vueltas y con algunas de las marcas constructoras de bicicletas más importantes del mundo, como es el caso por ejemplo de la alavesa BH.
Por eso, lo que cabe esperar de los tres días que el Tour va a estar girando por las carreteras vascas es mucha pasión y una compenetración total entre la afición y los ciclistas.
Siempre es una buena noticia que los deportes con tradición se celebren en lugares en los que hay pasión por ellos. Más en una época en la que muchas competiciones están huyendo a tierras lejanas a cambio de un patrocinio jugoso o de cualquier otro incentivo alejado de lo que realmente es el deporte y su afición. Por eso, que el Tour salga del País Vasco es una excelente noticia.