Con el auge del gravel, cada vez son más las marcas de bicicletas, componentes y accesorios que crean nuevos productos específicos para esta modalidad. De todas formas, aún no son muchas las zapatillas diseñadas especialmente para este uso, por lo que los ciclistas se ven obligados a elegir entre unas de carretera o de mountain bike.
Éstas últimas son las más recomendables, ya que cuando tenemos que echar pie a tierra nos permiten caminar más cómodamente, y tienen más agarre y estabilidad. Entre los muchos modelos de MTB disponibles en el mercado, los de cross country son los más adecuados para el gravel (y el ciclocross), ya que combinan la deportividad y prestaciones de la carretera con la practicidad de la montaña.
De hecho, muchas zapatillas XC son casi una versión adaptada de sus homólogas de carretera, pero con suela de tacos y protecciones extra en el empeine. Éste es el caso de las G.Sincro, las tope de gama de mountain bike de Gaerne, cuya estructura y materiales son similares a los de las G.Stilo para el asfalto.
Nosotros las hemos probado durante semanas en nuestras salidas gravel, combinando tramos de carretera con pistas y caminos. En los primeros destaca especialmente la rigidez de su suela de fibra carbono y su ligereza, mientras que cuando llegamos a superficies de tierra brilla su confort y ajuste, entre otras cualidades.
Materiales de primera
Pero vayamos por partes y analicemos primero cómo están fabricadas las Gaerne G.Sincro (en Italia, por cierto). Comenzaremos por su suela MTB EPS Light Weight Carbon Fiber, como se denomina ésta. La experiencia de la marca trasalpina en la construcción de suelas de carbono para sus zapatillas se une aquí al empleo de tacos de goma Michelin, toda una garantía de rendimiento y rigidez, por un lado, y durabilidad, agarre y tracción, por otro.
Al ser unas zapatillas de cross country, sus tacos no son muy numerosos ni prominentes, pero sí efectivos y con una colocación óptima para poder caminar puntualmente o echar pie a tierra con seguridad en tramos complicados. Además, si vamos a circular por zonas difíciles, en la parte delantera se pueden incorporar dos tacos extra, aunque para un uso gravel no lo vemos necesario, quizás sólo en ciclocross en circuitos exigentes.
Otro aspecto que nos ha gustado mucho de las Gaerne G.Sincro es su ajuste mediante dos ruedas Boa IP-1. Se manejan de forma fácil, rápida y precisa a la hora de apretar o aflojar las zapatillas, incluso en marcha. Las ruedecillas tienen una forma ligeramente hexagonal y con un acabado en goma para mejorar el manejo con los dedos. Destacar también que por cada Boa hay cuatro puntos de anclaje de los cables, lo que evita puntos de presión.
Para garantizar la sujeción del pie, Gaerne también ha empleado la construcción TSS (Tarsal Support System), que ayuda a mantener una correcta posición del mismo dentro de la zapatilla y mejorar así el pedaleo. El rígido talón de carbono inyectado y la superficie antideslizante de su interior contribuyen igualmente a la estabilidad y el control del ciclista, algo que se agradece especialmente cuando incrementamos el ritmo o nos ponemos de pie sobre la bicicleta, por ejemplo.
En cuanto al empeine y la lengüeta, están fabricados con microfibra sintética con múltiples perforaciones mediante láser. Gracias a ellas mejora la ventilación y transpirabilidad de las zapatillas en las jornadas más cálidas. Las protecciones en laterales y punta garantizan la resistencia ante rasguños o golpes si circulamos por zonas estrechas con vegetación o piedras, por ejemplo. De todas formas, el empeine es ya de por sí bastante rígido.
Polivalentes
En líneas generales, nos han gustado mucho las Gaerne G.Sincro. Creemos que son unas excelentes zapatillas para el gravel que además nos pueden servir para otras muchas situaciones (ciclocross, mountain bike, incluso cicloturismo relajado…). Obviamente, se trata de un producto de gama alta que busca las máximas prestaciones, por lo que si somos de salidas relajadas podemos optar por otros modelos de la marca italiana más básicos.
De hecho, el único aspecto negativo a resaltar sería su precio, de 339,90 euros, muy elevado para la mayoría de bolsillos, aunque en la línea de este tipo de productos premium. Por cierto, además de en negro, como las hemos probado, las G.Sincro están disponibles en color naranja y verde, versiones ambas muy atractivas también, y en hasta 14 tallas entre los números 39 y 47. Otro punto a favor de estas exclusivas zapatillas.
+ Positivo: Suela de fibra de carbono con tacos Michelin · Cierres Boa · Ligereza
– Negativo: Precio
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