Ir en bicicleta por la carretera es por desgracia peligroso en muchas ocasiones. El ciclista es vulnerable ante el resto de vehículos que circulan y por ello hay que extremar siempre las precauciones.
Ser visibles por el resto de usuarios de la calzada es fundamental para garantizar nuestra seguridad. En esta labor las luces traseras son fundamentales, ya que avisan a coches, motos, camiones o furgonetas de nuestra presencia.
Sigma lo sabe muy bien y por ello ofrece algunas de las luces más avanzadas del mercado. Una de las últimas incorporaciones a su colección es la Blaze Flash, de la que ya os hemos hablado en TopBici.
Este modelo es la evolución de la anterior Sigma Blaze e incorpora una interesantísima novedad. Y es que, como su propio nombre indica, la Blaze Flash dispone de modos de iluminación intermitentes, lo que aumenta su visibilidad y, por lo tanto, su seguridad.
Si a ello le añadimos que esta luz para bicicleta dispone de una función de frenado, su practicidad es aún mayor. Y es que los tres LEDs de la Blaze Flash se iluminan cuando disminuimos considerablemente nuestra velocidad para avisar a quienes circulan detrás nuestro (bicicletas u otros vehículos) y que así puedan mantener la distancia de seguridad adecuada.
Casi perfecta
El no disponer de modos de iluminación intermitentes era quizás la única pega que le vimos a la Blaze en su momento cuando la probamos. Esto era debido a que en su principal mercado, el alemán, están prohibidos, pero ahora con está versión la Blaze Flash nos parece un producto casi perfecto.
Además de la seguridad que proporcionan sus diferentes modos de iluminación y la función de freno, esta luz trasera lo tiene todo. Su estética nos parece atractiva y elegante. Moderna y limpia, encaja muy bien en cualquier bicicleta.
Se monta fácil y rápidamente en la tija sin necesidad de herramientas. Es pequeña y con solo 22 gramos de peso, es también muy ligera. Su precio de 27,95 € la hace asimismo un accesorio económico.
La batería de la Blaze Flash se recarga en sólo tres horas. Dispone de un indicador de carga que avisa cuando queda poca. Además, es resistente a las salpicaduras según el estándar IPX4.
Modos de iluminación
La Sigma Blaze Flash dispone de hasta cuatro modos de iluminación para que el ciclista pueda elegir el más útil en cada momento y situación. Dos son intermitentes y otros dos fijos. A ello hay que añadir la función de iluminación al frenar, que funciona con todos ellos.
Estas son sus principales características:
- Luz automática: el faro trasero está apagado y el sensor de luminosidad detecta la cantidad de luz ambiente para encenderlo automáticamente cuando es necesario (por ejemplo al pasar por un túnel o en tramos de bosque con poca iluminación).
- Luz permanente: el led superior siempre está encendido ofreciendo un punto de luz fijo.
- Pulse Flash: los tres LEDs rojos intermitentes parpadean continuamente. Este es el modo que ofrece una mayor visibilidad a los vehículos que se acercan por detrás.
- Eco Flash: parpadea solo el LED superior, proporcionando así una mayor duración de la batería.
Cabe destacar que en función del modo de iluminación elegido, la batería durará más o menos, lógicamente. Esta varía entre las 9 y las 50 horas, como indicamos en el gráfico adjunto. Otro dato a tener en cuenta es que las luces de la Blaze Flash son visibles hasta una distancia de unos 500 metros.
La luz trasera con función de freno Sigma Blaze Flash es un accesorio para la bicicleta más que recomendable. Seguro, práctico, fácil y cómodo de utilizar tanto de día como de noche, lo tiene todo para hacer la vida mejor al ciclista.
+ Positivo: Modos de iluminación · Diseño · Precio
– Negativo: Nada